Los monocitos son un tipo de glóbulo blanco. Ayudan a combatir bacterias, virus y otras infecciones en tu cuerpo. Junto con otros tipos de glóbulos blancos, los monocitos son un elemento clave de tu respuesta inmune.

Analicemos más de cerca los monocitos, cómo te mantienen saludable, y qué significa cuando tus niveles de monocitos son altos.

Además de las plaquetas y el plasma, la sangre contiene glóbulos rojos y blancos. Solo alrededor del 1 por ciento de tu sangre está compuesta de glóbulos blancos, pero juegan un papel enorme en la protección de enfermedades. Hay cinco tipos de glóbulos blancos, cada uno con un propósito específico.

La médula ósea produce monocitos, y los libera en el torrente sanguíneo. Una vez que llegan a los tejidos de tu cuerpo, se les llama macrófagos. Allí, aíslan y eliminan gérmenes y otros microorganismos dañinos. También eliminan las células muertas y ayudan en la respuesta inmune.

La siguiente es información resumida sobre los otros tipos de glóbulos blancos:

  • Basófilos segregan sustancias químicas para ayudar a combatir las alergias y los agentes infecciosos.
  • Eosinófilos atacan los parásitos y células cancerosas y ayudan con las reacciones alérgicas.
  • Linfocitos producen anticuerpos contra bacterias, virus y otros invasores.
  • Neutrófilos eliminan bacterias y hongos.

Los glóbulos blancos por lo general solo viven de 1 a 3 días, por lo que la médula ósea produce más de manera constante.

Para saber cuántos monocitos circulan en la sangre, necesitarás un análisis de sangre. Esta prueba determina el nivel de cada tipo de glóbulos blancos en la sangre. También puede indicar si algunos tipos de glóbulos blancos son anormales o inmaduros.

El análisis diferencial de sangre se realiza de la misma manera que la mayoría de los otros análisis de sangre. Se tomará una muestra de sangre de tu brazo. No tienes que ir en ayunas ni prepararte para esta prueba.

Una vez que se extrae la sangre, un tinte especial ayuda al patólogo a contar los diferentes tipos de glóbulos blancos en la muestra.

Es un examen que tu médico podría solicitar para ayudar a diagnosticar infecciones o afecciones como anemia y leucemia.

Los glóbulos blancos viven en un delicado equilibrio. Mientras uno está alto, otro podría estar bajo.

Analizar los monocitos solos podría no dar el panorama completo. Es por eso que cada tipo de glóbulo blanco se indicará como un porcentaje en tu informe de análisis de sangre. Este informe puede referirse a este como un recuento de leucocitos. Es otro término para recuento de glóbulos blancos.

Los monocitos típicamente constituyen un porcentaje bastante pequeño de los glóbulos blancos. El rango normal de cada tipo de glóbulo blanco es:

  • Monocitos: 2 a 8 por ciento
  • Basófilos: 0.5 a 1 por ciento
  • Eosinófilos: 1 a 4 por ciento
  • Linfocitos: 20 a 40 por ciento
  • Neutrófilos: 40 a 60 por ciento
  • Neutrófilos jóvenes (banda): 0 a 3 por ciento

Es probable que tu recuento general de glóbulos blancos aumente en respuesta a:

  • estrés agudo
  • trastornos de la sangre
  • respuesta inmune
  • infección
  • inflamación

Cuando tu nivel de monocitos es alto, lo que se conoce como monocitosis, significa que tu cuerpo está luchando contra algo.

Algunas afecciones que pueden causar un aumento en los monocitos en la sangre son:

  • infecciones virales, como mononucleosis infecciosa, paperas y sarampión
  • infecciones parasitarias
  • enfermedad inflamatoria crónica
  • tuberculosis (TB), una enfermedad respiratoria crónica causada por un tipo de bacteria

Tener demasiados monocitos también es la señal más común de leucemia mielomonocítica crónica. Este es un tipo de cáncer que comienza en las células que producen sangre en la médula ósea.

Un estudio reciente sugiere que un mayor recuento de monocitos puede estar relacionado con enfermedades cardiovasculares, y que la detección temprana de este aumento podría ayudar a evaluar el manejo de la salud del corazón. Se necesita más investigación a gran escala para confirmar esto.

En muchos casos, el equilibrio entre los diferentes tipos de glóbulos blancos habla por sí mismo.

Por ejemplo, un estudio de 2015 encontró que una proporción alta de monocitos a linfocitos bajos puede ayudar a identificar la actividad de la enfermedad en personas con colitis ulcerosa.

El tratamiento de niveles elevados de monocitos depende de la causa. Es posible que tu médico tenga que hacer más pruebas para determinar la causa subyacente. En general, el tratamiento puede incluir lo siguiente:

  • El tratamiento para las infecciones virales suele centrarse en el manejo de los síntomas.
  • Los antibióticos pueden tratar muchas infecciones bacterianas, como la tuberculosis.
  • Hay muchos tipos de enfermedades parasitarias. Necesitarás pruebas de laboratorio para determinar la causa exacta antes de que te puedan recetar el medicamento correcto.

El tratamiento para los cánceres de sangre puede incluir:

  • quimioterapia
  • radioterapia
  • trasplantes de células madre
  • terapia de apoyo
  • cirugía

Cuando se trata de glóbulos blancos, seguramente querrás mantenerlos dentro del rango saludable. Si tu recuento de glóbulos blancos es demasiado bajo, tendrás más posibilidades de enfermarte. Si es demasiado alto, significa que tu cuerpo está luchando contra algo.

El ejercicio regular es un componente importante para disfrutar de una buena salud en general y mantener recuentos hematológicos adecuados. Hay evidencia que sugiere que el ejercicio puede ayudar a mejorar la función de los monocitos, especialmente a medida que se envejece.

Dado que los monocitos responden a la inflamación, una dieta antiinflamatoria podría ser beneficiosa. Los alimentos antiinflamatorios incluyen:

  • aceite de oliva
  • vegetales de hoja verde
  • tomates
  • fresas, arándanos, cerezas y naranjas
  • nueces
  • pescado graso, como salmón, atún, sardinas y macarela

Algunos alimentos, como los que se enumeran a continuación, pueden aumentar la inflamación. Limita tu consumo de:

  • carne roja y procesada
  • carbohidratos refinados, como productos horneados, pan blanco y pasta blanca
  • frituras
  • sodas y otras bebidas azucaradas
  • margarina, manteca y manteca de cerdo

La dieta mediterránea es un buen ejemplo de una dieta antiinflamatoria. Incluye una gran variedad de vegetales y frutas frescas, nueces, semillas, pescado, aceite de oliva y granos enteros.

El recuento de glóbulos blancos es complicado. Si crees que tu nivel de monocitos es demasiado alto, habla con tu médico sobre la causa, si necesitas tratamiento y si los cambios en el estilo de vida pueden ser útiles.

Los monocitos, junto con otros tipos de glóbulos blancos, son una parte vital de tu sistema inmunitario. Te ayudan a que estés protegido contra infecciones y enfermedades.

Si tus niveles de monocitos son más altos de lo que deberían ser, tu médico trabajará contigo para encontrar la causa y comenzar cualquier tratamiento que pueda ser necesario.

Leer el artículo en inglés.

Traducción al español por HolaDoctor.

Edición en español por Suan Pineda el 4 de febrero de 2022.

Versión original escrita el 19 de noviembre de 2019.

Última revisión médica realizada el 19 de noviembre de 2019.